Para los padres siempre es importante proporcionar a sus hijos actividades con las que puedan recrearse, estar activos y ser felices. Esto es así porque el juego es uno de los factores más importantes en el desarrollo de los niños.
Aunque pueda parecer algo secundario o de menor importancia, el juego y las actividades divertidas son los medios por lo que los niños pueden aprender más fácilmente. Estos estimulan la creatividad, las capacidades físicas, mentales, sensoriales y afectivas, ayuda a que conozcan su cuerpo y contribuye con su desenvolvimiento en grupos.
A continuación se presentan cuatro juegos con los que los niños pueden aprender mientras se divierten.
Taller de ciencias casero
El mundo de las ciencias guarda infinidad de conocimientos y explicaciones que pueden resultar muy interesantes y divertidas para los niños. Acercar a los niños a las ciencias naturales como la física, la biología o la química a través de los juegos es una forma muy acertada de darles a conocer cómo funciona el mundo.
Los experimentos para niños estimulan el aprendizaje y disminuyen el miedo a las cosas desconocidas.
Asimismo, esto puede generar en ellos mucha curiosidad, con lo que vendrá también el descubrimiento de nuevas capacidades e intereses. Con un taller de ciencias en casa los niños pasarán un rato muy agradable, ya que les fascina descubrir nuevas cosas.
Dependiendo de la rama de las ciencias que se quiera mostrar, varía la elaboración del taller y su complejidad, sin embargo, suelen ser muy fáciles de realizar y se necesitan cosas que por lo general están en casa o pueden conseguirse rápidamente.
Juguetes de madera
Los clásicos juguetes de madera son una excelente forma de desarrollar las capacidades motoras y creativas de los niños de una manera divertida y muy original.
Aparte de ser muy económicos y amigables con el medio ambiente, los juguetes de madera son muy resistentes y duraderos, así como también desprenden una fragancia muy agradable.
Lo más recomendable es un juguete de madera que se pueda desarmar y cambiar al estilo de los famosos Legos, ya que desarrolla de gran manera la habilidad de los niños para utilizar sus propias manos, estimular la creatividad para crear distintas formas y objetos con las mismas piezas, incrementar su seguridad y confianza en cuanto a trabajos realizados por ellos mismos, y les aporta conocimientos básicos sobre cómo usar herramientas que les servirán a lo largo de su vida.
Asimismo, los niños no solo pueden fabricar juguetes desarmables, sino que también pueden diseñar sus propios espacios con cajas de madera que serán útiles en su habitación para guardar cosas o en el resto de la casa. Esto aporta mucha más seguridad y alegría a los niños, al ver que su creación es funcional para el resto de la familia.
Patines en línea
Los patines en línea son uno de los regalos más pedidos por los niños en comuniones, cumpleaños, navidades y demás celebraciones enfocadas en dar regalos. La gran mayoría han tenido un par de patines con los que se divertían de pequeños, y esto se mantiene hasta el día de hoy, porque sigue siendo un juguete muy deseado entre los pequeños de la casa.
No solo es un regalo muy común entre los niños y que seguramente amarán, sino que también pueden funcionar como una oportunidad para mostrar su personalidad y expresarse a través de los diferentes colores y formas en los que vienen diseñados. Se pueden comprar en línea en sitios web como maspatines.com, donde se encuentra gran variedad de colores, tamaños, etc.
Asimismo, aunque parece solo un juguete, aprender a usar un par de patines puede representar muchos beneficios para los niños. Estos pueden estimular positivamente su motricidad y el manejo de su cuerpo para realizar desplazamientos. Esto no solo representará una mejor condición física, sino que evitará el miedo a actividades deportivas y recreativas de este tipo.
También representan beneficios para su personalidad, ya que dominar esta actividad incrementará la seguridad del niño en sí mismo y lo impulsará a asumir nuevos retos. Incluso, un par de patines puede volverse la puerta al inicio de una vida deportiva, siendo el rollerblading o patinaje en línea, por ejemplo, un deporte formal.