Escribiendo sin ofender: las contradicciones de Ariana Harwicz
Ariana Harwicz, reconocida escritora argentina nacida en Buenos Aires en 1977, afirma que «escribir sin ofender a nadie es un oxímoron», una contradicción en sí misma. En su nuevo ensayo ‘El ruido de una época’ (Gatopardo), continúa con su polémica ‘Trilogía de la pasión’ y reflexiona sobre la libertad de los escritores y creadores en un tiempo marcado por censuras morales, reescrituras sensibles y linchamientos públicos.
Una visión audaz y desafiante
Harwicz defiende, sin tapujos, que al escribir está dispuesta a aceptar y explorar todo, sin limitaciones. En ‘El ruido de una época’, la autora nos muestra su visión audaz y desafiante sobre la escritura y el arte contemporáneo. Para ilustrar sus argumentos, Harwicz incorpora citas y referencias a famosos creadores como Imre Kertész, Marguerite Yourcenar, Glenn Gould, Marguerite Duras, Edgar Degas y Grigori Sokolov, quienes, según ella, encarnan «una forma de pensar el arte que ya…».
El arte como expresión honesta
Según Harwicz, la verdadera esencia del arte radica en la capacidad de ser honesto y sin concesiones. Para ella, la escritura debe ser un espacio donde se explore todo aquello que la sociedad puede considerar incómodo o inaceptable. Reconoce que esta postura puede generar controversia y ofender a algunos, pero señala que es precisamente en la confrontación donde radica la autenticidad de la obra.
Los desafíos de una época censora
En nuestra época, marcada por la sensibilidad extrema y la autocensura, los escritores y creadores se enfrentan a un gran desafío. Harwicz lamenta que muchas obras sean sometidas a parches morales, reescrituras y censuras públicas para evitar cualquier asomo de polémica o confrontación. Para la autora, esta actitud limita la libertad artística y convierte el arte en una mera herramienta comercial y políticamente correcta.
Reflexiones sobre el futuro del arte
En ‘El ruido de una época’, Harwicz también se aventura a reflexionar sobre el futuro del arte en una sociedad cada vez más polarizada y sensible. Plantea interrogantes sobre cuánto más se podrá censurar y cuánto de la verdadera esencia del arte se perderá en el camino. Su voz crítica y provocadora invita a repensar nuestros límites y reconsiderar si el arte debe ser cómodo o incómodo, agradable o desafiante.
Con ‘El ruido de una época’, Ariana Harwicz nos confronta con las paradojas y contradicciones del mundo literario y artístico actual. Su visión desafiante y valiente nos invita a reflexionar sobre el papel del escritor y del arte en una sociedad que, cada vez más, busca evitar cualquier forma de confrontación. Sin duda, Harwicz se posiciona como una voz enérgica y necesaria en la escena literaria contemporánea.