La NBA siempre y en todo momento ha tenido un inconveniente con la relación existente entre sus jugadores y las armas. Un martirio que vivió su máximo exponente en dos mil nueve cuando Gilbert Arenas , estrella de los Washington Wizards, y su compañero Javaris Crittenton se encañonaron en el vestuario, y que ha revivido esta temporada con el astro de los Memphis Grizzlies, Ja Morant , que hace una semana alardeó de artillería en un vídeo en Instagram. Un estigma que asimismo semejan tener los jugadores cuando se retiran, puesto que el exjugador de los Seattle Supersonics Shawn Kemp (cincuenta y tres años) se vio implicado en un tiroteo el pasado jueves. Conforme medios estadounidenses, el que fuera uno de los ala pívots más poderosos de la liga en la década de los noventa, vio de qué manera su vehículo era asaltado mientras que estaba en un centro comercial de la localidad de Tacoma , en el estado de Washington, por unos ladrones, que le quitaron múltiples posesiones personales, entre ellas su móvil. Kemp, cuando se dio cuenta del hurto, geolocalizó su teléfono (una alternativa frecuente que acostumbran a tener los móviles) y tras localizar a los asaltantes, aún en su vehículo y en exactamente el mismo parking del centro comercial, estos empezaron a disparar contra él, acto que provocó que Kemp respondiera al fuego con una pistola que en ese instante llevaba encima. Conforme el informe policial, absolutamente nadie resultó herido. Nueva Relacionada Baloncesto estandar No El olimpo de los Lakers: las camisetas retiradas que lucirán al lado de la de Pau Gasol Emilio V. Escudero La franquicia angelina honrará hoy al pívot de España, cuyo dorsal número dieciseis va a quedar por siempre al lado de su nombre El bólido de los ladrones se dio a la fuga tras el intercambio de disparos y poco después, Kemp ingresó en cárcel, donde pasó la noche para ser puesto en libertad este viernes debido a que, conforme las autoridades, «actuó en defensa propia», una «justificación razonable» en palabras del letrado del exjugador, puesto que conforme la versión de Kemp fueron los ladrones quienes abrieron fuego primeramente. Kemp, de este modo, suma una nueva muesca a su lista de irregularidades extradeportivas, unas que ya le asediaron a lo largo de su etapa en los Sonics, con los que llegó a ser de los mejores jugadores de la NBA , 6 veces All-Star, y donde se llegó a decir que tenía inconvenientes con el alcohol y una agitada vida sentimental (la historia legendaria habla de que tiene once hijos en 9 relaciones diferentes). Otros casos La lista es tan larga como espinosa. Al ya mentado caso de Ja Morant, duro golpe para la liga al tratarse de uno de los jugadores más mediáticos del planeta, se le suman otros como el de Kevin Porter Junior , actual escolta de los Houston Rockets, que en dos mil veinte fue detenido por posesión ilegal de armas (iba en su vehículo con una pistola cargada), o el del exbase de los Minnesota Timberwolves Sebastian Telfair , que llegó a ser condenado a 3 años y medio de prisión por exactamente el mismo delito que Porter. Aun Converses ‘El Gordo’ Barkley reconoció que a lo largo de su etapa como jugador llevaba una pistola todo el tiempo pues se sentía «más seguro». Un inconveniente que se extiende hasta la liga universitaria. La semana pasada, la estrella de Alabama Brandon Miller , uno de los grandes proyectos del país, con muchas opciones de ir a la NBA, se vio implicado en un asesinato. Le dio un arma a un compañero de equipo, la que fue utilizada para acometer el homicidio de un joven de veintitres años, si bien semeja que por último no va a haber cargos contra el prometedor alero.