La correcta selección y uso de los componentes de un equipo es fundamental para garantizar su funcionamiento óptimo y prolongar su vida útil. Todo es importante, desde el procesador hasta los sistemas de enfriamiento y ventilación, por lo que se deben revisar constantemente para asegurar que operen adecuadamente.
El ordenador es un recurso muy útil que ayuda a resolver diversas tareas y situaciones en la oficina, estudios y hasta en la vida personal de muchos. La elección y mantenimiento de los componentes adecuados es esencial para que los equipos funcionen de manera perfecta y se mantengan siempre operativos.
Por tal razón, todas las partes, por muy pequeñas o insignificantes que parezcan son importantes en los equipos y como tal, se deben tratar. Todas las piezas requieren especial atención y deben examinarse con cierta regularidad para que no fallen y puedan perjudicar el funcionamiento y hasta la vida de tu PC.
Para conseguir cualquier componente solo debes buscar en una buena tienda, las cuales, incluso, facilitan todo al vender de forma online. En estas empresas web puedes conseguir cualquier parte para tu PC, de las excelentes marcas y en variados modelos, con solo dar unos pocos clics.
Procesador
La Unidad Central de Proceso (CPU, por sus siglas en inglés de Central Processing Unit), es el componente que procesa todos los datos del ordenador, por lo tanto es esencial elegir uno adecuado, con la capacidad y características apropiadas, para satisfacer las necesidades del usuario.
Además, es importante tener en cuenta la compatibilidad del procesador con otros componentes del equipo, como la placa base y la memoria RAM. Por lo general, se recomienda elegir un procesador de última generación, ya que son más eficientes y cuentan con nuevas tecnologías de ahorro de energía.
Sistemas de ventilación
Los ventiladores son esenciales para el enfriamiento y la ventilación en los equipos. Su función es extraer el aire caliente del equipo e incorporar aire más fresco.
Son piezas imprescindibles para tu PC, toda vez que debido a las velocidades y procesos que manejan pueden sobrecalentar sus componentes y llegar a dañarse. Su función principal es mantener una temperatura adecuada en conjunto con los disipadores de calor para evitar estos problemas.
Hay una amplia variedad de ventiladores, con sus propias características y capacidades. Entre ellos destacan los de 120 mm y 140 mm, que son muy seguros y garantizan la eficiencia y potencia que se necesitan para proteger los equipos.
Placa base
La placa base es el elemento que conecta todos los demás componentes, por lo que su elección es esencial para garantizar un funcionamiento óptimo. Se debe seleccionar una compatible con el procesador y la memoria RAM, y que tenga suficientes puertos USB, SATA y PCI para las necesidades del usuario.
Además, es importante tener en cuenta la calidad de los componentes de la placa base, como los capacitores y los mosfet, ya que esto puede afectar su durabilidad y su capacidad de overclocking.
Tarjeta gráfica
También identificada como GPU (Graphics Processing Unit), tiene por función procesar en el ordenador todo lo que sea imagen. Es especialmente importante para aplicaciones gráficas intensivas como juegos, diseño gráfico, animación y renderizado.
Memoria RAM
Es la pieza electrónica donde se almacenan transitoriamente los datos que el procesador utiliza para efectuar sus cálculos. Es esencial elegir una memoria RAM adecuada para las necesidades del usuario, ya que esto afectará la velocidad y la capacidad multitarea del equipo.
Para un correcto funcionamiento, se debe tener en cuenta su compatibilidad con el CPU y la placa base. También es recomendable elegir una marca y modelo conocidos por su calidad y durabilidad.
Almacenamiento
Es la parte física que almacena permanentemente los datos del equipo. Se debe elegir según los requerimientos del usuario, por cuanto de su tamaño depende directamente la capacidad de almacenamiento del equipo y la velocidad de acceso a la información.
Existen dos tipos de almacenamiento: los discos duros y los SSD. Los discos duros son más económicos y ofrecen mayor capacidad de almacenamiento, pero son más lentos que los SSD; mientras que los segundos son más rápidos y duraderos, pero su capacidad de almacenamiento es menor y su precio más elevado.