CienciaEl cerebro de los gatos está encogiendo, y es...

El cerebro de los gatos está encogiendo, y es por culpa nuestra

-

Nos hacen compañía, saben en qué momento entraremos en casa antes que lleguemos, se tumban plácidamente en nuestro regazo o bien nuestros piés, ronronean de placer cuando les acariciamos e inclusive pueden comunicarse con nosotros, expresando sus diferentes necesidades con diferentes géneros de maullido. Mas el cerebro de los gatos ya no es el que era. Está encogiéndose, haciéndose poco a poco más pequeño, y la culpa es plenamente nuestra.

Esa es, exactamente, la conclusión primordial de una investigación recién publicado en la gaceta ‘Royal Society Open Science’ y llevado a cabo por estudiosos de la Universidad de Viena y el Departamento de Ciencias Naturales de los MuSeos Nacionales de Escocia. En su artículo, los autores han equiparado las medidas craneales (un indicador del tamaño del cerebro) de los gatos familiares modernos con las de 2 de sus antepasados salvajes más próximos, los gatos monteses africanos (
Felis lybica
) y europeos (
Felis silvestris
). El equipo descubrió que el tamaño del cráneo, y por ende del cerebro, en los gatos familiares se ha reducido significativamente en los últimos diez años en comparación con el de sus ancestros salvajes.

Lo que, conforme los estudiosos, no significa necesariamente que nuestro gato casero sea más imbécil, por poner un ejemplo, que un gato montés. Lo que sí semeja probar es que la mansedumbre de los animales familiares puede haber alterado la manera en que se desarrollan estos animales. El estudio sugiere que estos cambios podrían comenzar cuando el gato es todavía un feto y apenas esté comenzando a desarrollar las células de su cresta neural, que solo tienen los vertebrados y que, entre otras muchas cosas, desempeñan un papel clave en el desarrollo del sistema inquieto.

«La selección de la mansedumbre en la domesticación de animales -reza el artículo-, puede haber ocasionado una regulación a la baja en la migración y proliferación de las células de la cresta neural, lo que lleva a una minoración de la excitabilidad y el temor. No obstante, esta regulación a la baja asimismo puede ocasionar cambios relacionados en la morfología, la contestación al agobio y el tamaño del cerebro».

En su estudio, los estudiosos contestaron múltiples trabajos precedentes, de las pasadas décadas de mil novecientos sesenta y mil novecientos setenta, en los que se establecían comparaciones entre el tamaño de los cráneos de gatos familiares y salvajes. No obstante, ciertos de esos estudios solo equiparaban a los gatos modernos con el gato montés europeo, que ya no se considera como su ancestro directo.

La investigación actual muestra que el cerebro de los gatos familiares ha sufrido una substancial reducción de hasta el veinticinco por ciento en comparación con los gatos monteses africanos y europeos. Los estudiosos asimismo examinaron una serie de especies híbridas de gatos salvajes/domesticados, y hallaron que estas medidas craneales encajan a la perfección en la media entre las especies salvajes y familiares.

La suma de todos estos datos muestra a las claras que la domesticación ha tenido un efecto significativo en la evolución de los gatos a lo largo de los últimos miles y miles de años, un fenómeno que asimismo puede observarse en otras muchas especies de animales amaestrados. «Los cambios en el volumen craneal -escriben los autores- han sido bien documentados en otras especies familiares, como conejos, ovejas, perros y muchas más».

Entender esto aporta una nueva perspectiva no solo a los cambios de desarrollo inducidos por la domesticación, sino más bien asimismo a la conservación de muchas especies salvajes conminadas por la hibridación con animales familiares.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Últimos...

Más artículos...RELACIONADOS
Recomendados