La espiral inflacionista da la puntilla a los negocios españoles en un instante de reactivación económica tras padecer un par de años de limitaciones por la pandemia. La presente crisis de costes impacta ya en las pequeñas y medianas compañías, que suponen el noventa y seis por ciento del tejido empresarial del país. El incremento desbocado de los costos está afectando de forma notable a las pequeñas y medianas empresas y, en consecuencia, estropeando sus márgenes y poniendo bajo riesgo su aptitud. Específicamente, más de la mitad de estas compañías aceptan que sus márgenes se ven reducidos por la presión inflacionista, una situación que pone bajo riesgo la aptitud del quince por ciento de las pequeñas y medianas empresas españolas y que fuerza a otro dieciseis por ciento a buscar financiación auxiliar para encarar unos gastos en alza. Estas conclusiones se extraen del último Barómetro de opinión de las pequeñas y medianas empresas #LaPymeHabla efectuado por Cepyme a lo largo de los primeros meses del año, de donde asimismo se extrae que más de la mitad de las compañías están trasladando el aumento de costos a los costes de venta al consumidor.
La subida de costos y costos está afectando de forma notable a las compañías, estropeando sus márgenes e inclusive afectando su aptitud. En detalle, más del noventa y cuatro por ciento de las compañías consultadas por Cepyme apuntan que se ven perjudicadas (treinta y dos por ciento ) o muy perjudicadas (sesenta y dos por ciento ) por estos aumentos. El primordial inconveniente se deriva del encarecimiento de los suministros, un escenario que afecta ya al setenta y uno por ciento de las compañías. Por otra parte, la subida de la factura energética asimismo daña al veintinueve por ciento de las pequeñas y medianas empresas encuestadas.
La situación se dificulta cuando las compañías no pueden repercutir este incremento de costos en el coste final para no frenar el consumo. En desglose, el cuarenta y dos por ciento de las pequeñas y medianas empresas consultadas aseveran que no están trasladando la carga en origen al costo de venta. Por el contrario, algo más del cincuenta y ocho por ciento de las compañías consultadas sí que están trasladando el aumento de costos. Sin embargo, estas subidas no son siempre y en toda circunstancia suficientes para compensar el aumento de los costos ni para asegurar la aptitud empresarial.
Estancamiento de las ventas
En el mentado informe asimismo se incide en que la espiral inflacionista tiene sitio en un escenario de restauración económica tras un par de años de cierres y restricciones a la actividad por los contagios de Covid-diecinueve. En verdad, 7 de cada diez empresas consultadas aseveran que la crisis del Covid-diecinueve les afectó de manera negativa (cincuenta y uno por ciento ) o muy de manera negativa (diecinueve por ciento ). En consecuencia, más de 6 de cada diez empresas califican la coyuntura económica actual como mala (cuarenta y ocho por ciento ) o malísima (quince por ciento ).
Ahora de restauración, más de la mitad de las compañías han registrado un estancamiento en la facturación o una caída de las ventas para el treinta por ciento de los negocios. Así, las esperanzas sobre la evolución de la facturación en los próximos 12 meses no son halagüeñas: un sesenta y uno por ciento de las compañías consultadas piensan que las ventas se sostendrán atascadas o se reducirán.
El uso presenta una evolución más positiva ya que empresas que elevaron su plantilla fueron más que las que decidieron prescindir de empleados. De esta manera, al tiempo que un veinte por ciento de las compañías consultadas optaron por acrecentar el número de trabajadores; el dieciseis por ciento optaron por despedir. Por otro lado, más del sesenta y tres por ciento de las compañías sostuvieron sin cambios a sus plantillas en los últimos 12 meses. Las esperanzas para el año próximo asimismo son positivísimas y un ochenta y ocho por ciento de los responsables de las compañías piensan que no van a despedir o, aun, contratarán a más trabajadores.
En cualquier caso, de la evolución y previsión de ventas y de empleo se desprende que las compañías están padeciendo una caída de la productividad, tanto en lo concerniente a ventas por trabajador, como al beneficio por cada uno de ellos de ellos. El barómetro de Cepyme refleja que los negocios no tienen previsto que la caída de la productividad se resuelva en un corto plazo, una coyuntura que compromete su competitividad y su porvenir.
Entre los inconvenientes que más preocupan a las pequeñas y medianas empresas en estos instantes, resaltan los relacionados con el aumento de los costos laborales (cincuenta y cuatro por ciento ) y de los impuestos (cuarenta y nueve por ciento ). Ahora, se citan obstáculos como las contrariedades para hallar personal cualificado (treinta y nueve por ciento ), el incremento de los costos de los insumos (treinta y dos por ciento ) y la morosidad (diecisiete por ciento ).
Las compañías asimismo se muestran preocupadas por los dos aspectos que tienen más que ver con la acción del Gobierno. Así, para el ochenta y dos por ciento de los negocios, la política empresarial del Gobierno es bien poco o nada apropiada. La verdad es que el setenta y tres por ciento de los portavoces de las compañías consultadas consideran bien poco o nada apropiada la última reforma laboral.
Con el fin de poder examinar mejor la situación de la pequeña y mediana empresa, Cepyme empezó en el mes de marzo de dos mil diecinueve un Barómetro de opinión que recaba la valoración de las compañías de los diferentes aspectos de la coyuntura económica que les afectan y de sus esperanzas en un medio plazo. En el último muestreo, efectuado desde el quince de enero al trece de abril del actual año, se han recogido las creencias de cerca de setecientos empresas, merced al esmero de coordinación efectuado por las organizaciones empresariales. Además de esto, la participación supone un leal reflejo de la composición del empresariado de España, ya que la extensa mayoría de las contestaciones la conforman las micro y pequeñas empresas (cincuenta y cinco por ciento del total de las compañías consultadas). En lo que se refiere a ámbitos, el sesenta y cinco por ciento de las compañías se encuadran en el ámbito servicios.