La estimulación cerebral, una técnica empleada para el tratamiento de enfermedades como el párkinson, termina de probar tener un efecto positivo en ciertos trastornos de ansiedad, como prueba un pequeño ensayo conduzco llevado a cabo en dos personas con trastorno por atracón y obesidad severa. Los resultados de este pequeña prueba, publicado en « Nature Medicine » y que es parte de un ensayo clínico más abundante, muestra que la estimulación cerebral guiada por patrones de actividad neuronal asociados con los antojos de comestibles, mejoraba el autocontrol en el consumo de comestibles y el perder peso en dos mujeres con trastorno por atracón y obesidad severa. Estos descubrimientos prueban la aptitud y la seguridad de tratar a las personas con pérdida de control de su nutrición por medio de una estimulación cerebral profunda de circuito cerrado guiada fisiológicamente. La nutrición desmandada es una característica extendida en todos y cada uno de los atracones y se identifica por una pérdida de control inhibitorio como contestación a las señales de hambre y los antojos. Pese a su prevalencia y gravedad, la mayor parte de los tratamientos para la obesidad no la abordan de forma directa, lo que limita la eficiencia de las medidas más beligerantes, como la cirugía bariátrica. Lo que ahora plantea el equipo de Casey Halpern del Centro de Neuromodulación en Depresión y Agobio de la Universidad de Pensilvania (EE.UU.) es el uso de esta técnica para manejar estos estímulos.- Los estudiosos registraron patrones de actividad electrofisiológica , a lo largo de un periodo de seis meses, en la zona ventral y dorsal del núcleo accumbens en los cerebros de dos mujeres de cuarenta y cinco y cincuenta y seis años y diagnosticadas con trastorno por atracón y tratamiento. A lo largo del estudio se recogieron las medidas de la actividad cerebral de estas pacientes a lo largo de los periodos asociados con la anticipación de los comestibles a lo largo de las comidas estándar, a lo largo de los antojos de comestibles y con nutrición desmandada. Utilizando estos datos, los autores identificaron una ‘firma’ de actividad cerebral de baja frecuencia que se asoció particularmente con los antojos y una nutrición desmandada en las dos pacientes. Nueva Relacionada estandar Más tarde, usaron este biomarcador cerebral últimamente identificado para guiar la estimulación cerebral profunda del núcleo accumbens en las dos pacientes usando un dispositivo capaz de alentar el cerebro profundo sensible o de circuito cerrado. Los resultados mostraron reducciones significativas en la nutrición desmandada y la siguiente pérdida de peso en las dos pacientes tras seis meses de estimulación cerebral. Una de las pacientes ya no cumplía los criterios para el trastorno por atracón. No se notificaron efectos secundarios desfavorables grave s. Los resultados preliminares de este estudio conduzco destacan la factibilidad clínica potencial de esta nueva intervención y respaldan el estudio progresivo de cohortes más grandes de pacientes con trastorno por atracón.
Una investigación confirma que la estimulación cerebral controla los trastornos alimenticios
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